El valor del diseño.
Si algo positivo está teniendo el momento que vivimos desde hace ya más de un año, es el tiempo de reflexión ganado al ritmo frenético de nuestras vidas. La necesidad de vivir con prudencia está extendiendo el uso de las horas y su valor. Para mí, entre otras cosas, ha supuesto un tiempo para la reflexión profunda. Poder parar, escuchar el ruido de la ciudad, seguir los pasos naturales de una hormiga que ha trepado hasta la barandilla de la terraza, mirar el cielo detenidamen