FREEHAND ARQUITECTURA, DETRÁS DEL FLAMANTE PER SE BISTRÓ
En Madrid no se para de hablar del regreso definitivo del gran Andrés Madrigal, el cocinero de indescriptible altura y creatividad que se dio a conocer y admirar en el Balzac… Pero cabe destacar su compañero estético: ¡Freehand Arquitectura! El estudio Boutique de Arquitectura, decoración e interiorismo, de la mano del gran Chef en esta, su más ambiciosa aventura, nos cuenta cómo ha transformado un local desfasado en el restaurante más deseable de la ciudad.
El local está en la calle Augusto Figueroa, en el corazón de Chueca, y la idea original partió del deseo de un cambio radical sin mover ni un solo muro, solo a través de los recursos del interiorismo y la decoración ¡Todo un reto para cualquier estudio! Del que Freehand Arquitectura ha salido victorioso y el Chef feliz.
El estilo como se aprecia en las imágenes es elegante y acogedor en tono contemporáneo extremadamente fino, pero sin perder la calidez necesaria. En un restaurante frío pierden todos, el Chef, el plato y el comensal, por supuesto. Madrigal soñaba con un lugar donde todos se sintieran cómodos, un espacio profundamente natural. De acuerdo a sus ideas, Freehand ha materializado un restaurante en madera en acabado nogal, piedra, y hierro totalmente orgánico, texturas mates y muy honestas, como sus platos. Nada más entrar nos encontramos con una barra donde poder tomar algo mientras nos asignan la mesa adecuada, con una encimera de una piedra sinterizada acabado peonazzo. La mesa del chef reina en la parte central del restaurante y para los curiosos que llegan a Per Se atraídos por el legendario Chef del Bistró, la cocina está abierta.
Incluso la cristalería, cubertería y la mantelería han sido elegidas por Freehand y con la vajilla de arcilla, que sorprende a todos los clientes diseñada por Valle, la artista y pareja sentimental del Chef, Freehand Arquitectura ha construido la lampara enorme a modo de collage hecha con platos que pende del techo del bistró.
La iluminación está extremadamente cuidada en Per se Bistró, una mala excesiva o insuficiente luz en un restaurante hace que el visitante no desee volver; por eso, se ha mimado la luz de Per sé, con un efecto muy distinto de día, de tarde y de noche donde toda la iluminación es regulable para la visión relajada y perfecta de la mesa y la comida.
Había una vez un enano, al servicio doméstico del monarca Luis XIV de Francia, el rey Sol, al que llamaban Gueridón; su trabajo consistía en llevar pequeños pasteles al rey en una bandeja. Al ser de estatura muy baja, no colocaba la bandeja sobre la mesa, sino que se quedaba de pie junto al rey, a una altura muy cómoda, con las bandejas de golosinas hasta que éste había saciado su apetito. Desde entonces en casas y palacios empezaron a llamar a las mesas y muebles de apoyo a los comedores Gueridón.
Per se Bistró es un restaurante de lujo y por eso Freehand ha diseñado también un elemento inequívoco: un gran mueble amarillo naranja glosando las grandes marcas de lujo como Hermes o Vuitton. Una reinterpretación del clásico «gueridón» para guardar las mantelerías, ese mueble, alhacena donde reposaba la cubertería, la cristalería, vajilla, cestos, servilletas, hornillos, cortadoras y otros utensilios de servicio, para comodidad cercana del camarero.
